Exceso de velocidad 360 multas diarias

A una semana de que las siete cámaras móviles instaladas en semáforos en distintos puntos de la ciudad empezaran a registrar excesos de velocidad, se labraron más de 360 multas diarias, a razón de unas 52 por cruce. Esto implica que durante la última semana las faltas bajaron un 30 por ciento, teniendo en cuenta que cuando arrancó el período de prueba y concientización de los conductores, en marzo pasado, el promedio de infracciones superaba las 570 diarias (75 por cámara). A estas multas hay que sumar otras 25 que cada cámara registra al día sólo por pasar en rojo.

Estos datos fueron suministrados ayer por el subdirector de Ingeniería de Tránsito, Gerardo Vignolo, luego de seis días desde la puesta en marcha formal del nuevo sistema de detección de infracciones.

En rigor, las cámaras se venían probando ya desde hace tres meses, en un período que desde la repartición definieron a la vez como de prueba (si bien ya estaba totalmente autorizado por el Instituto Nacional de Tecnología Industrial, Inti) y de educación y concientización de los automovilistas.

Móviles. La idea es que periódicamente las cámaras se muden de esquina. La prioridad para su instalación la tienen las avenidas y calles con alto volumen de tránsito y mala performance en materia de accidentes, que a priori quedaron delimitadas en unos 60 cruces.

Según recordó Vignolo, cuando los radares quedaron instalados en los semáforos en marzo pasado (sin labrar multas aún, pero con registro de la velocidad y toma de fotografía digital), el promedio de cruces en verde que superó la máxima permitida fue de 75 por cámara al día. Al mes siguiente, la media de infracciones por la misma falta ya había bajado a 65.

Pero, evidentemente, la educación vial se complementa bien con el dolor en el bolsillo, ya que desde el 26 de mayo pasado, cuando se empezaron a labrar actas de comprobación por infracción en esos cruces, el promedio diario bajó a 52 cruces en verde a mayor velocidad de la permitida.

En esas actas quedan plasmados, entre otros datos, la imagen del vehículo, su patente, la fecha y hora, la velocidad a que se desplazaba el vehículo y la máxima permitida.

Las sanciones no son desdeñables: van de 350 a 960 pesos, con el agravante de que si se cometen dos infracciones en el mismo cruce se pueden acumular.

Por ejemplo, cuando un rodado cruza en rojo y a mayor velocidad de la autorizada, se le labran dos actas. Y si el juez de faltas lo decide, los montos punitivos se suman.

Por eso conviene recordar que el máximo permitido en Rosario es de 60 kilómetros por hora en avenidas y de 40 en calles (salvo que la señalización vertical indique una excepción, como ocurre en un carril de bulevar Rondeau, que es de 70, o en proximidad de escuelas y hospitales, o en las llamadas zonas calmas).

Optimista. Como sea, el subdirector de Ingeniería de Tránsito (área a cargo de la implementación del nuevo sistema de cámaras trashumantes) vio con buenos ojos los resultados de las primeras estadísticas.

"Vamos por buen camino", dijo Vignolo, convencido de que los controles que la repartición registrará en estadísticas semanales y de acuerdo también a protocolos regulados por el Inti pueden seguir mostrando una mejora en la conducta de manejo.

Desde 2000 y hasta marzo pasado, las cámaras ya venían registrando los cruces en rojo (en el inicio de la fase lumínica, en el medio y al final). Durante ese lapso, la velocidad promedio en la ciudad había mejorado en 20 kilómetros por hora.

Ahora, con el recurso tecnológico de los cinemómetros, que captan en simultáneo ambos tipos de infracción grave, la expectativa por nuevas mejoras crece.